¿Qué es?
Un funcionamiento anómalo y excesivo de la glándula paratiroidea generando un desequilibrio en los niveles de calcio en el cuerpo. Distinguimos entre hiperparatiroidismo primario y secundario.
Causas
Entre las causas más frecuentes destacamos las siguientes:
- Crecimiento de las glándulas paratiroideas
- Aparición de adenomas (tumores benignos)
- Falta de vitamina D
- Insuficiencia renal crónica
- Enfermedades que causen calcio bajo en sangre
Síntomas
Habitualmente el hiperparatiroidismo suele diagnosticarse antes de que los signos o síntomas se manifiesten. Puesto que suelen encontrarse altos niveles de calcio en sangre al realizarse una analítica. De no ser así, y el paciente presentara signos, los más frecuentes son:
- Huesos débiles que se fracturan con facilidad
- Cálculos renales
- Orina excesiva
- Dolor abdominal
- Cansancio y debilidad
- Dolor en los huesos y las articulaciones
- Náuseas, vómitos o pérdida de apetito
Tratamiento
El tratamiento variará en función de los signos y síntomas del paciente, puesto que no siempre está indicada la cirugía, sin embargo, si el calcio es muy elevado en sangre y el paciente presenta adenoma, este deberá ser extirpado. Al igual que en ocasiones también debe extirparse todas las paratiroides si estas han aumentado en tamaño o son de forma difusa.
Este procedimiento se denomina paratiroidectomia selectiva, y se lleva a cabo mediante una incisión inferior a 2 cm en la parte anterior del cuello que se localiza previamente con pruebas radiológicas como la gammagrafía.
Recuperación postquirúrgica
Generalmente, tras una noche de ingreso, el paciente obtendría el alta hospitalaria, pudiendo así volver a su rutina habitual, siempre y cuando se garantice que la zona queda completamente limpia y seca.
¿Qué pasa si no se trata?
Si no se trata el hiperparatiroidismo irá desencadenando grandes problemas de salud, puesto que el cuerpo empezaría a absorber el calcio de los huesos, aumentado la probabilidad de sufrir fracturas de huesos.